TIPOS DE CALENTADORES
Es importante que en todo hogar contemos con agua sanitaria y caliente, especialmente en época de frío. Aunque existen varios tipos de calentadores, el elegido debe adaptarse tanto a las necesidades del cliente como a las particularidades de la casa.
Los calentadores más instalados son los que funcionan a gas, el eléctrico y el termo de agua. Con todos trabajamos y desde el inicio aclaramos a los consumidores cómo es el funcionamiento, pues no trabajan igual que las calderas, por ende no están vinculados al sistema de calefacción.
Es un punto clave porque el desconocimiento tiende a confundir al comprador. Los calentadores pasan el agua fría a través de su mecanismo interior y la devuelven caliente a las redes de tuberías. Solo se conecta al sistema de grifería y con él tendremos agua a buena temperatura siempre que el grifo esté abierto.
Sea de gas o eléctrico, al momento de seleccionar se consideran entre otros aspectos el consumo regular en la vivienda y la cantidad de usos diarios, para calcular los litros que requiere el calentador, a fin de responder satisfactoriamente las demandas del usuario.
ASÍ FUNCIONA UN CALENTADOR DE GAS
Los calentadores de gas hacen su trabajo al producirse la combustión y consumir un poco de oxígeno. Son de los más utilizados porque permite un consumo efectivo y controlado.
No implica un sistema complicado. El mecanismo se activa a través de fogones ubicados estratégicamente dentro del aparato y que calientan las tuberías por las que circula el agua. La temperatura sube poco a poco y el usuario puede regularlo mediante mandos.
El calentamiento es progresivo, no ocurre al primer segundo, por lo que es normal que al girar la llave el agua salga fría y mientras cae comience a calentarse. Aparte, el calor residual de las tuberías también influye en el incremento de grados; de hecho, si se apaga y solo se abre el grifo para agua caliente, contarás con unos minutos extra de agua termal.
Estos pueden trabajar con gas natural, butano o propano, aunque el tipo dependerá del aparato. ¿Pero cuál es la gama de calentadores a gas?
VARIEDAD DE CALENTADORES DE GAS
Hay calentadores estancos cuya combustión de gas es en una cámara interior separada herméticamente para que no haya fugas. Al mismo tiempo, pueden ser de condensación, los cuales se benefician de la combustión de energía para continuar calentando; disponen de un desagüe que se deshace del agua de condensación.
Los calentadores de gas natural son de gases no envasados, sino provenientes de instalaciones que lo suministran por tuberías. No ocupan espacio, se extraen de restos fósiles descompuestos en capas profundas del suelo y contenidos en tanques que los resguardan de cambios atmosféricos.
Gracias a su potencia el agua sale caliente desde el primer momento.
Los calentadores de gas butano son los más populares de la variedad. Se trata de una unidad metálica de contención en la que se guarda el gas; una válvula va conectada al calentador y a una toma de agua que calienta apenas encienden los fogones.
La temperatura y potencia es controlada por manivelas. Mientras no está en uso queda encendida una llama piloto para que haya agua caliente cuando sea necesario, así se caldea en poco tiempo y no se despilfarra energía.
Un calentador de gas propano usa gas envasado que va en una unidad de contención de mayor capacidad. Hablamos de bombonas de por lo menos 35 kilos o más. Son ideales para talleres, oficinas o fábricas, en general espacios en los que el consumo es continuo. La potencia del propano es superior para calentar el agua y soporta extremas temperaturas.
LA SEGURIDAD DE UN CALENTADOR ELÉCTRICO
Como supones, estos funcionan con electricidad gracias a las resistencias que calientan el agua. Son bastantes seguros porque no requieren de combustible, así que se descarta el peligro de explosión o fuga.
La desventaja en comparación con la gama de gas, es el precio: son más caros para el consumidor, por lo que cuesta la electricidad. Pero se les saca partido porque manteniendo las mismas prestaciones se reduce tanto como es posible el consumo energético.
La recomendación es verificar la etiqueta energética, en la que se especifica cuánta electricidad gasta el calentador para trabajar como es debido.
SACA VENTAJA A LA RAPIDEZ DEL TERMO ELÉCTRICO
El termo eléctrico es un calentador sencillo que consta de un depósito para almacenar el agua que luego se usará. El tanque se enciende con electricidad, se calienta y el agua circula por la tubería. Desde el primer momento se cuenta con líquido caliente.
Lo malo es que cuando se vacía, hay que esperar nuevamente el proceso para disponer otra vez de agua caliente.
Algunos termos eléctricos tienen un dispositivo que llena y calienta de manera automática y se activa al bajar la temperatura del agua; de hecho, puede programarse el calentamiento para ahorrar consumo y que el agua no permanezca calentándose.
Si el tanque del termo es lo suficientemente grande, es capaz de alimentar los radiadores y surtir a toda la casa.
CALENTADORES ATMOSFÉRICOS Y SOLARES
A la gama de calentadores de agua añadimos los atmosféricos y solares. Los primeros dependen del oxígeno en una habitación para que se genere la combustión; la mayoría son de tiro forzado, facilitando que salgan los gases en lugar de quedarse en la recámara.
Dado su riesgo y baja eficiencia, algunas comunidades autónomas no permiten su instalación.
Los solares rinden más a escala energética. Los hay con efecto termosifón, para que el agua suba y se caliente. Se ahorra de 60 a 75% de electricidad, pues mezcla el calentamiento del líquido con la energía solar, la cual no se gasta y tampoco perjudica el medio ambiente.
Funcionan con una placa que recoge las radiaciones y calienta un tanque de almacenamiento, para luego proveer la casa. Aunque su instalación es costosa, por tratarse de paneles solares, a largo plazo resulta una buena inversión.
PROBLEMAS QUE PUEDE PRESENTAR TU CALENTADOR DE AGUA
Nadie quiere que los calentadores fallen, por eso hay que tener su mantenimiento al día, independientemente del tipo de equipo instalado.
Solemos valorar más las bondades del agua caliente cuando dejamos de recibirla por alguna avería en los aparatos, pero son asuntos que se pueden prevenir, prestando atención a pequeños cambios en el suministro o funcionamiento de los calentadores.
Entre los problemas más comunes que reportados por los clientes, es que el equipo deja de calentar y puede deberse a una membrana rota, falta de suministro de gas e incluso una obstruccion en las tuberias de agua los cuales impiden que el agua transite completamente por la red.
¿CÓMO HACER QUE VUELVA A CALENTAR EL AGUA?
La fluctuación de temperaturas aqueja a quienes usan el calentador. Ocurre que si el aparato deja de utilizarse por largo tiempo, el agua tiende a salir más fría.
Pasa porque tras inactividad prolongada los calentadores no detectan con precisión y celeridad que cambia la temperatura, generando un proceso inverso a su fin principal, aunque también cabe la posibilidad de calentar en exceso, quemando más de lo que debe.
Una solución para regular la temperatura es sustituir o reparar la membrana o desobstruir los tubos. Lo adecuado es consultar con nuestros expertos, para que determine el camino viable.
La decisión dependerá de la edad del calentador y los precios tanto de la reparación como del reemplazo.
SEÑALES QUE ANUNCIAN AVERÍAS EN UN CALENTADOR
Cuando decimos que el calentador “avisa” que sufrirá algún desperfecto, es porque la experiencia en el área nos enseñó que hay señales para saberlo.
Entre otras, estas son señales de una posible falla en el calentador de tu casa: el agua ya no es caliente, emiten ruidos sordos o se perciben mínimas explosiones (como de aire), el agua se tiñe de óxido, se oyen sonidos agudos que provienen del grifo, mal olor y fugas en la base del equipo.
Si bien un experto tiene el conocimiento para abordar el problema, el usuario puede inspeccionar por su cuenta antes de llamar al profesional.
Antes de lanzarse a ubicar la avería, hay que apagar el calentador desconectandolo de la corriente y cerrando el suministro de gas.
ACCIONES QUE PUEDES TOMAR PARA REGULAR LA TEMPERATURA
Cuando el agua ya no es tan caliente como uno quisiera, puede ser porque la válvula de control del piloto no está bien y el termopar del gas tiene defectos al igual que el termostato.
Lo que cabe es verificar la llama del piloto de gas, ajustar o reemplazar el termopar y colocar otra vez la válvula. Es importante constatar que llegue electricidad al termostato.
Si el agua es demasiado fría es probable que: el tamaño de la unidad se quedó corto ante las demandas de agua caliente; la instalación de plomería no se hizo correctamente y se cruzan las conexiones (fría y caliente); haya problemas con el control y suministro de gas; o el tubo de inmersión esté dañado o roto
Para estos últimos casos la alternativa es ver que la demanda de agua caliente no exceda la capacidad del calentador y cambiar o reparar las conexiones; igualmente se chequea la llama de gas natural (debe ser azul brillante con ligero amarillo arriba) o propano (verde azulado y ligero amarillo en la punta).
Si es un calentador eléctrico, hay que constatar que el suministro sea continuo.
En todos los casos la limpieza del depósito es básica, porque los sedimentos obstruyen el flujo.
¿CÓMO PUGAR UN CALENTADOR PARA QUITAR EL OXIDO?
Si el agua del grifo sale color óxido, es posible que haya corrosión dentro del tanque o que falle la barra del ánodo de sacrificio que debe disolverse para que no exista corrosión en el depósito.
Reemplazando dicha barra con una de magnesio, habremos solucionado. Todas estas piezas las ofrecemos para que usted no tenga que preocuparse por rastrearlas. Las incluimos en el presupuesto que sin compromiso le presentamos.
Lo que procede en este caso es purgar el calentador, usando solución de peróxido de hidrógeno; sería un litro de este químico al 3% por cada 40 galones de agua.
Esta mezcla se usa para lavar el tanque y dejar que corra por las tuberías. Unas dos horas dentro del depósito serán suficientes para que limpie. No es tóxica y tampoco hay que enjuagar.
Si tras este proceso continúa el hedor, hay que cambiar el ánodo por uno de aleación de zinc. Y si todavía no acaba, entonces corresponde instalar un nuevo calentador, preferiblemente con el tanque recubierto en plástico.
ELIMINA LOS RUIDOS DEL CALENTADOR
Cuando tu calentador de agua emite explosiones o ruidos sordos, realmente lo que escuchas es el agua hirviendo y sucede porque hay sedimentos en exceso en el fondo del tanque, provocando el recalentamiento y ebullición.
En este caso conviene purgar a través de la válvula para desagüe.
De los calentadores eléctricos también se escuchan ruidos agudos, igualmente por el acopio de material en las partes calefactoras del equipo. Purgar nuevamente es la salida.
Se puede resolver sacando los depósitos de material e instalando elementos de menor voltaje y con grandes superficies, para que transfieran agua eficientemente, pero conduciendo menor carga eléctrica.
REPARAR UNA FUGA EN EL CALENTADOR
Como ya mencionamos, una de las fallas frecuentes es la fuga que se produce en la base del calentador o alrededor de esta. Pasa cuando la presión es defectuosa, igual que la válvula de seguridad de temperatura.
Producto de la presión excesiva, esta válvula puede atascarse o sobrecalentarse. De igual forma, incide en esta clase de avería que existan fugas en el área superior de las tuberías, cerca de estas o en el depósito de agua.
Se solventa abriendo y purgando la válvula de seguridad, pues así libera residuos. Si persiste la fuga, entonces minimiza la temperatura del termostato a fin de evitar sobrecalentamiento o inspecciona el tanque viendo desde la cámara de combustión.
Al observar marcas de óxido o agua en al fondo de la cámara, tiene que cambiarse el calentador.
Para todos los casos, cuente con nuestros servicios.
REEMPLAZAR CALENTADORES DE AGUA
Sea a gas o eléctrico, lo mejor es dejar la instalación o reemplazo de un calentador de agua en manos de expertos. Es un trabajo que requiere de conocimientos precisos, pues se manejan varias conexiones y no saber acoplarlas resulta un desastre.
Indiferentemente del equipo, necesitan de una conexión que vaya a la toma de agua exterior del inmueble, para conseguir el agua fría; otra a la red doméstica, que es la que surtiría de agua caliente y la tercera es con el suministro energético que permitirá el funcionamiento.
Si el aparato marchará a gas, es mucho más importante que la instalación esté a cargo de un técnico especializado; de lo contrario se corre el riesgo de dejar fugas y ocasionar siniestros.
Asimismo, es fundamental el visto bueno del inspector de fontanería de la localidad, para verificar que se cumplan con cada permiso, criterio o requerimiento municipal.
Partiendo de estos puntos, lo que sigue es la instalación. No quiere decir que usted no pueda hacerlo, pero sí que será un trabajo expedito y seguro si lo ejecuta una empresa como la nuestra.
ALISTE EL REEMPLAZO DE SU NUEVO CALENTADOR
Lo primero es seleccionar el modelo de calentador, procure que se conserve el mismo tipo de combustible que el anterior. Verifique que el aparato a comprar sea de un tamaño acorde al espacio disponible, de nada vale adquirir uno de 190 litros si no habrá amplitud suficiente entre el calentador y la pared.
No se puede comenzar la instalación si no se comprueba el estado de las tuberías. Hay que medir la dimensión existente entre los tubos de agua fría y caliente. Si es un calentador a gas, se realizan las uniones correspondientes en la línea de gas y se instalan las válvulas que permitirán abrir y cerrar el paso de agua.
Es necesario apagar el suministro de agua hacia la casa y de electricidad o gas, según sea el calentador que tenga. Cerciore que el gas se apagó viendo que la llama piloto no está activa.
PROCEDA A DRENAR EL TANQUE
Antes de montar el nuevo equipo, hay que hacer el drenado del tanque viejo. Se abre la llave de agua caliente que quede más cerca, se sostiene una manguera hacia la válvula de drenado en el calentador, mientras que el otro extremo va sobre el desagüe del piso.
Poco a poco se abre la válvula de drenado, de manera que el sedimento no tape el escape o desagüe.
Las tuberías se quitan con herramientas como pinzas de unión, llaves de tubos, lengüeta o pinzas de ranura. También hay que desconectar el tiro del calentador. Ya drenado y desconectado, todo queda listo para quitarlo y sustituirlo por el nuevo.
Al momento de instalarlo es bueno apoyarse con un nivel de torpedo o completo, para que quede derecho. Todas y cada una de estas herramientas van en nuestras cajas de trabajo.
ALINEACIÓN Y FUENTES DE COMBUSTIBLE PARA QUEMADORES
La operatividad de un calentador de agua tiene mucho que ver con la perfecta alineación de las tuberías, pues si las aberturas de entrada y salida no están a ras con los tubos, de nada valdrá el trabajo.
En caso que no esté instalada una válvula para apagar el suministro de agua fría, hay que colocarla. Además, se conectan los tubos mediante uniones, porque previenen reacciones electro galvánicas que echan a perder tanto las conexiones de los tubos como el propio calentador.
Es importante emplear lubricantes para tuberías o compuesto en el caso de uniones galvanizadas, así como teflón en las uniones de cobre. Tras esto, sigue conectar la línea de gas o eléctrica, de acuerdo con el tipo de calentador. A partir de allí, continúa la empalmar la fuente de combustible.
FUGAS EN LA INSTALACIÓN DE UN CALENTADOR
Para surtir de combustible un calentador de agua que funcione a gas, se enlaza la línea de gas a la válvula que controla el quemador; de ser necesario, se emplea una línea de gas flexible.
Comprobamos las fugas al abrir la válvula que suministra el gas y echar una solución jabonosa en las uniones y control del quemador; si se generan burbujas, hay que apretar para corregir la fuga.
En ocasiones puede haber un sellado débil, aunque no se produzcan burbujas. Los operarios de Ibérica de Calderas lo resuelven en segundos.
LLENADO Y ENCENDIDO DEL NUEVO CALENTADOR
Al culminar con todas las conexiones para reemplazar el calentador de agua, se sigue con el llenado y encendido para probar que todo está en orden.
Se llena con agua fría y se activa la unidad. Al abrir el suministro de agua fría, también se gira la válvula del suministro principal, la cual fue cerrada para la instalación.
Mientras, se llena el calentador. Comprobamos que alcanzó su tope cuando encendemos el grifo de agua caliente del baño o la cocina y comienza a salir agua por alguno de estos. Probablemente aún esté fría, pero es parte del proceso.
Ya con el tanque listo, nuevamente encendemos el panel correspondiente reinstalando el fusible o interruptor, en caso que sea eléctrico; si es a gas se ve que la válvula respectiva esté abierta y active el piloto.
Finalmente se gradúa el termostato, entre 110 y 130 °F y todo está listo para que usted disfrute de su calentador.
SOMOS LOS MEJORES PROFESIONALES INSTALANDO CALENTADORES
El mantenimiento de estos aparatos es explicado al usuario, para prevenir averías. Cada equipo, a gas, eléctrico, termo de agua y otros, traen sus recomendaciones.
Esta guía específica puede parecer complicada, para quien no se dedica a este tipo de labores. Afortunadamente, si le rondan dudas sobre el procedimiento, estamos para ejecutar la acometida por precios que se ajustan a su bolsillo.
La calidad de nuestra mano de obra no tiene discusión, pues además de realizar un trabajo rápido, no dejamos fallas.
Poseemos las herramientas, los accesorios, el conocimiento y sobre todo la disposición para instalar calentadores por primera vez o sustituir esos equipos que ya dieron toda su vida útil.
MANTENIMIENTO DE CALENTADORES DE AGUA
Existen artefactos para el hogar de amplia utilidad, de una larga lista podemos destacar el calentador de agua. Pero son realmente favorables siempre y cuando el equipo se encuentra en buen estado, de lo contrario apenas se le podrá sacar ventaja.
El mantenimiento es clave para que un calentador surta a la vivienda de agua caliente y su vida útil se prolongue. Además, llevar a cabo el cuidado preventivo forma parte de las normas de seguridad que implican tales equipos.
Asimismo, uno malo arrastra secuelas que van más allá de simplemente bañarse con agua fría; por ejemplo, los que operan a gas se activan al generarse la combustión y si no están a tono, el calentador derivaría gases nocivos.
Los expertos de Ibérica de Calderas ofrecemos un servicio que garantizará que seguridad cada vez que usen el calentador.
¿CÓMO REALIZAR EL MANTENIMIENTO DE UN CALENTADOR?
Lo importante en el afán de conservarlos en perfecto estado, se centra en el control vigilado de cada una de sus piezas. Un cuidado básico es ojear siempre las mangueras de abastecimiento y no improvisar en ellas tendederos, pues el peso las daña.
La válvula de presión es otra de las partes que constantemente debemos escudriñar, para que no se sobrepase la acumulación de gases, debido a que podría generarse un estallido. El calor en exceso también incide. Con un purgado periódico se controla; por ser meticuloso, encomiéndelo a las cuadrillas de Ibérica de Calderas.
Siguiendo en el tanque, drenarlo al menos anual, es primario para deshacerse todos los restos y sedimentos de cal que se forman en tanto se calienta el agua.
Aunque estos son básico, dependerá del calentador comprado. De cualquier manera estamos prestos para trabajar con cualquier clase de artefacto, siempre apegados las normas de seguridad que dicta la fábrica, así como las regulaciones.
REPARACIÓN DE CALENTADORES DE GAS
El cuidado está estrictamente vinculado a la prevención, por lo que causa ruido relacionarlo con urgencias. Pero no es descabellado, pues por causas varias, en ocasiones, algunos usuarios relegan hasta que es inevitable la revisión. Y aquí estamos para colaborarles.
Cuando se trata de un calentador a gas, iniciamos el mantenimiento comprobando que el piloto del gas ande como es debido. Se verifica por luz LED o la llama piloto, señaladores del correcto suministro de gas al aparato.
También se examina la manivela de presión cuando son artefactos que se activan con gas propano o butano. Además de la supervisión periódica, hay una Inspección Obligatoria del Gas; esta prueba tiene que practicarse cada 5 años para los calentadores de 24,4 KW.
Es posible que el fabricador precise un ciclo más bajo y si es así hay que prestarle atención. En ese examen, el técnico confirma la efectividad y que no hay peligro de encenderlo.
El chequeo habitualmente se acuerda en los contratos y lo realizan las distribuidoras de gas y fabricantes de los calentadores; no obstante, el consumidor puede contratar una inspección privada.
MIRA POR QUÉ HAY QUE REVISAR EL CALENTADOR DE GAS
Si bien el ensamblaje de estos aparatos se idea para advertir a la persona en caso que haya desperfectos, antes que se susciten accidentes, no hay que minimizar el mantenimiento.
Ten en cuenta que cualquier instalación que implique el suministro de gas, forzosamente tiene que estar en perfectas condiciones.
En caso que no se haga el mantenimiento, hay peligra que se dispare la presión y bote en exceso de monóxido de carbono.
Es cierto que por las nuevas tecnología cada día se crean calentadores lo suficientemente seguros, aun así hay que ser precavidos.
CUIDADOS BÁSICOS DEL CALENTADOR ELÉCTRICO
Al igual que un calentador a gas, los eléctricos necesitan de cuidados. Igualmente traen válvulas para aplacar la presión; estas podrían colapsar cuando el tanque está sobrepresurizado y el efecto sería una explosión.
El tanque también tiene que ser lavado, porque si amontona sedimentos energéticamente no rendirá como un calentador limpio.
Las fugas también se detectan y corrigen a tiempo con mantenimiento. Las ocasionan las conexiones mal hechas o el uso de materiales que no son de calidad.
Todas esas incidencias las abarcamos en Ibérica de Calderas, al contar con los operarios más capacitados y los instrumentos indispensables en cada acometida.
PLANIFIQUE EL MANTENIMIENTO DEL CALENTADOR
Así como somos responsables con el uso del calentador de agua, también hay que estar pendientes de su mantenimiento y las reglas de uso.
Como profesionales, recomendamos agendar las fechas de revisión del equipo y sugerimos como lapso cada seis meses, de manera que se pueda asegurar que la falta de uso y el paso de estaciones frías y cálidas no han perjudicado el funcionamiento.
Cuando el gasto se hace anticipadamente por prevención, se evitan desembolsos mayores por desperfectos “sorpresas” que afectan la economía doméstica.
No limite su posibilidad de contar con agua caliente. Lleve un calendario para asegurarse de cumplir con las revisiones. Esta es una manera de tener un calentador bueno, sea eléctrico, a gas o los que funcionan con paneles solares.
TÉCNICOS DE CONFIANZA PARA CALENTADORES
Es un error desestimar las señales que alertan sobre fallas, porque lo siguiente será esperar a que el fontanero anuncie la muerte del aparato.
Los equipos se sacrifican constantemente surtiendo agua caliente, así que descuidarlos implica su parada.
Asimismo, disponga de técnicos que estén dispuestos a trabajar a cualquier hora, si llegase a ocurrir una urgencia con su calentador. Los de Ibérica de Calderas responden todo el año, sin titubeos, y solventan los percances que pueda sufrir el aparato.
LOS CALENTADORES DE AGUA SIN TANQUE
Los calentadores son utensilios que cobran gran relevancia en el hogar por proveernos de agua a temperaturas cálidas, tanto para ducharse como para otras tareas.
Es normal que las viviendas cuenten con estas instalaciones, garantes de confort, especialmente cuando llegan las estaciones de frío.
¿Qué calentador seleccionar? La respuesta a esta inquietud dependerá de aspectos como cuánta agua caliente se consume o frecuencia de uso en casa, los servicios específicos que quieres, el espacio disponible para la instalación, etc.
No hay que dejarse guiar por puntualidades como las marcas. Aunque estas dicen mucho del producto, no todas poseen la misma funcionalidad, así que lo conveniente es revisar con el proveedor del servicio o una empresa dedicada a este ramo, como Ibérica de Calderas, para seleccionar el calentador que justamente necesitas.
Uno que se añade a la variedad son los que no tienen tanque.
CALENTADORES DE AGUA SIN TANQUE
Los calentadores de agua que no tienen tanque llegan como una solución para inmuebles residenciales. Los hay para la casa entera y en versiones de punto; de hecho, algunos están medidos para calentar apenas una taza de té.
Funcionan calentando agua justo en el momento que se necesita, al contrario de los calentadores convencionales que almacenan el líquido en su tanque sin que haya pérdida residual de calor.
Al hablar de pérdida residual nos referimos al calor y la energía gastada mientras se calienta el agua para que quede en el depósito; es lo que hacen los calentadores comunes. Que uno sin tanque evite tal pérdida, les regala un punto positivo en cuanto a la eficiencia en el uso de energía.
FUNCIONAMIENTO DE LOS CALENTADORES DE AGUA SIN TANQUE
El trabajo de los calentadores sin tanque inicia cuando el agua fría pasa a la unidad y comienza a tibiarse por el intercambiador de calor; este se enciende a través de un interruptor.
El intercambiador dispone de carretes que calientan a través de resistencias eléctricas o un quemador de gas (propano o natural), las cuales poseen mucha capacidad de subir la temperatura para toda la casa, siempre que sean más grandes.
Algunos puntos importantes a considerar para el adecuado funcionamiento del aparato son el volumen de agua que el equipo debe calentar y esta se mide como caudal en galones por minuto (GPM); la temperatura del agua que entra al calentador y la que se desea que salga.
Esa triada determina tamaño, tipo y cantidad de calentadores sin tanque que pudieran utilizarse.
¿CUÁL CALENTADOR SIN TANQUE ESCOGER?
Como ya comentamos, son dos clases básicas de calentadores sin tanque: los de punto y los que dan para toda la casa; la selección de alguno tiene que basarse en el uso que recibirá, pues eso es más determinante que el precio de tales artefactos.
Los de punto de uso son para casos puntuales, por ejemplo el lavabo de la cocina. Calientan hasta 170 grados instantáneamente. Los clientes destacan su practicidad para tareas precisas como calentar el agua para una infusión.
No son de gran tamaño y pueden instalarse en un gabinete o armario. Trabajan eficientemente con regaderas y grifos. Para colocarlos los técnicos de cualquier compañía cobran por punto de instalación.
Los calentadores sin tanque para toda la casa valen más, pues como su nombre lo indica tienen como función surtir a toda la vivienda de agua caliente, por ende, implican más componentes y gasto de energía.
VENTAJAS DE ELEGIR UN CALENTADOR DE AGUA SIN TANQUE
Para decidir si lo que necesitas es un calentador sin tanque en cada donde requieras agua caliente o si lo mejor es pagar por un sistema integral que suministre el servicio a toda la casa, consulta con los técnicos de esta compañía.
Ten en cuenta que suministran agua caliente de manera indeterminada, en contraposición con los tradicionales; además conlleva a otras ventajas como el ahorro de energía y menor huella de carbono, porque es más pequeño y emplea menos materiales.
Su exposición a la corrosión es baja y dura hasta 20 años, sin contar con que las piezas se reemplazan con facilidad en caso que sea necesario, alargando así sus años de operatividad.
Aunque algo más costosos, tanto el equipo como la instalación, a larga representan un gasto bien hecho porque con el paso de los años, mientras siguen incrementando su costo, el tuyo tendrá buena utilidad. Lo que sí ocurre con estos es que probablemente no obtendrías incentivos fiscales o créditos dependiendo de tu ubicación, sobre el suministro de energía.
CONSIDERACIONES PARA OPTAR POR UN CALENTADOR SIN TANQUE
Como consumidor, debes tener en cuenta la media de tarifas de servicios públicos a largo plazo en tu zona de residencia, porque eso permitirá que elijas un aparato que realmente te convenga. Si no es el calentador sin tanque, tal vez vaya mejor en tu caso uno a gas o eléctrico convencional.
Verifica junto con el técnico las alternativas de instalación, principalmente el espacio del cual dispones. Pide que proporcionen el presupuesto por la mano de obra y los materiales que se requerirán para la instalación del calentador.
Repasa también todas las características del aparato, porque así manejas de primera mano la información de seguridad. Examina con el técnico si el artefacto posee sensores automáticos para detectar el monóxido de carbono y el apagado automático, una vez que se recaliente la pieza intercambiador de calor.
Lo esencial es que el equipo sea capaz de suministrar agua caliente para toda la familia y no forzarlo para que trabaje por encima de su capacidad.
LOS CALENTADORES QUE MÁS SE VENDEN EN ESPAÑA
Los calentadores son utensilios que cobran gran relevancia en el hogar por proveernos de agua a temperaturas cálidas, tanto para ducharse como para otras tareas.
Es normal que las viviendas cuenten con estas instalaciones, garantes de confort, especialmente cuando llegan las estaciones de frío.
¿Qué calentador seleccionar? La respuesta a esta inquietud dependerá de aspectos como cuánta agua caliente se consume o frecuencia de uso en casa, los servicios específicos que quieres, el espacio disponible para la instalación, etc.
No hay que dejarse guiar por puntualidades como las marcas. Aunque estas dicen mucho del producto, no todas poseen la misma funcionalidad, así que lo conveniente es revisar con el proveedor del servicio o una empresa dedicada a este ramo, como Ibérica de Calderas, para seleccionar el calentador que justamente necesitas.
Si aún tienes dudas para elegir el nuevo aparato, sigue leyendo porque aquí conocerás cuáles son los más vendidos.
TERMO ELÉCTRICO TEKA
El termo eléctrico de Teka, consta de un tanque (de 80 litros) esmaltado y resistencia en cerámica, con un termostato que regula temperaturas entre 30° y 75º. Destaca como uno de los calentadores más solicitados por los clientes.
Es de gran calidad y sencillo de utilizar. En cuanto al rendimiento, los usuarios lo describen como superior, por su aguante prolongado en contraste con otros aparatos.
Los materiales con que se fabrican estos termos son de primera, para que no se susciten problemas con el agua y duren mucho más. El interior del artefacto está blindado con aislantes exclusivos, dispuestos en tres capas, prevaleciendo la resistencia esmaltada para que no se oxide.
BENEFICIOS DEL TERMO ELÉCTRICO TEKA
Invertir en los termos para calentar de Teka, es gastar bien en un equipo cuyos ánodos de magnesio, 30% más gruesos que los de sus similares, son capaces de eliminar la cal en el agua y no dejar que haya corrosión.
Son diseñados para ahorrar siempre que se abra el grifo, por ende el consumo con estos calentadores es energéticamente eficiente (35%); un punto adicional es que se puede regular su potencia y siempre contarás con agua caliente, pero gastando menos.
Igualmente resaltan la seguridad que el fabricante ofrece con estos productos, dotándolos den una válvula para controlar subidas de presión, así como un sistema de resguardo en caso de sobrecalentamiento.
La media de su consumo diario es está entre dos y cuatro personas.
CALENTADORES JUNKERS
Cuando de calentadores tradicionales se trata, JUNKERS salta al paso con equipos de calidad comprobada.
Los de depósito que crea esta marca son sinónimo de confort máximo. Con ellos no hay que preocuparse por comprar cerillos, porque sus pilotos sirven por pulsación eléctrica; también traen perillas para regular la temperatura y son agradables al no emitir sonidos mientras trabajan.
Puedes olvidarte del riesgo de quemaduras, porque su sistema evita el sobrecalentado. El tanque de fibra de vidrio ofrece aislamiento porcelanizado y previenen la corrosión al disponer de ánodos de aluminio. Son calentadores de larga vida.
CALENTADORES VAILLANT
Con ventajas similares, VAILLANT tiene otro modelo altamente demandado. Es el Recovery, calentador de agua cómodo, pensado para esas familias que tienen grandes necesidades de contar con agua caliente.
No requieren de mano de obra complicada para instalarse y operan en viviendas con diferentes niveles de presión.
Para tranquilidad del cliente, con cualquiera de estas marcas garantizamos una instalación y mantenimiento de primera.
Sin compromiso consulta, verás que no perderás interés en contratar el servicio de Ibérica de Calderas.
LE AYUDAMOS A CALCULAR GASTOS
En Ibérica de Calderas le ayudamos a los cálculos necesarios, para que el usuario reciba con tranquilidad a su nuevo equipo.
Tenga la certeza de que nuestro trabajo será ejecutado por técnicos capacitados para atender la instalación y el mantenimiento que demanda el aparato.
Con luces sobre los calentadores de agua sin tanque se amplía el menú o alternativas para que en su casa siempre cuenten con agua caliente.
Siempre le orientaremos para que escoja el equipo más rendidor, eficiente, económico y que valga la pena.